Marte era el dios de la guerra para los romanos, y hago referencia a esta deidad, porque en su honor se bautizó al segundo día de la semana, que es en el que estamos terminando de jugar nuestras batallas en el verde paño… publicidad del co-editor: favor llegar puntuales a las 7 y 30, porque a las 8 se reparte la primera mano y a las 12 se pone la escoba patas arriba detrás de la puerta… bueno, esto último no, pero valga el anuncio de todas formas.
Debo comenzar esta crónica diciendo que, en la decimosexta partida del Clausura 2011, la luz le faltó al tirano de turno, quien una semana antes había sumido en la oscuridad a todos con su cuarto Royal Flush en la historia de los Holdem. El pelotón de seguidores tenía campo abierto para acercarse un poco al Robert, que no estuvo entre los diez de la mesa grande; sin embargo, con Alvarín ausente, Orate “no vieras” fuera de la mesa final, y Markeins décimo por un agresivo, pero muy apresurado, all-in, poco fue lo que pudieron hacer Junior y Killer, que apenas rasguñaron puntos. Gordito, una vez más te quedaste por fuera de “the bubble”, o sea, “la burbuja”.
Un tercer primo se unió como invitado: Edgar. Gracias a una gran dosis de suerte y atrevimiento, el stack de este consanguíneo en tercer grado de Santi, era verdaderamente impresionante… ocho o nueve torres de fichas hacían pensar que los Holdem podían perder en casa. Pero las sabias palabras del Flako, y un oportuno póquer de nueves, derrumbaron las murallas de la visita: ¡los Holdem hacemos respetar la localía, carajo! Edgar está herido, su confianza se ha mermado, Jota le propina una herida mortal, y tras un par de patadas de ahogado, es el turno de un servidor para dar el coup de grâce merced a un par de Ases. Así, los tres que habíamos lucrado del chip leader inicial, nos apertrechamos para la recta final.
Es aquí que comienza la diosa Fortuna a hacer de las suyas. Sensei lleva la batuta, casi duplicándonos las fichas al Flako y a quien les habla, pero dejándose llevar por su confianza en un par de dieces y en un As Reina pintados, pierde casi todo su stack en dos all-in consecutivos contra As Rey. Quedándole poco más de diez mil en fichas, se recupera con un As dos contra un As seis… desgraciados patos -dos por falta de uno en el flop- que malograron una mano de otra forma dominada. Con el Flako ya fuera, el head-to-head fue un emocionante diálogo de suerte o muerte. Basta relatar dos manos para describirlo: Jota con el triple de fichas y un par de Ases bien escondidos, recibe un flop soñado… siete, As, ocho; un servidor, cayendo ingenuamente en la trampa, va all-in con cinco y ocho; demás está decir que Sensei, casi riéndose, hace un instant call; pero ¿quién podría haber predicho lo que venía? Turn y river ¡seis y nueve!
Mano final, all-in ciego del co-editor debido a lo avanzado de la hora, fichas balanceadas con cierta ventaja para Jota. Este paga -¿por qué pagas Sensei?- con Reina y kicker bajo en suit, cuatro de tréboles por más señas. Abro mis cartas, y hallo con no poca sorpresa Reina y Sota… mano dominada. El flop trajo cinco, siete y ocho, el turn una Sota, y el river un infausto ¡seis! Bien dice el verso que, para subir al cielo se necesita una escalera grande y otra chiquita.
Salud para el digno vencedor de la noche y madrugada, ¡buena Sensei!
Debo comenzar esta crónica diciendo que, en la decimosexta partida del Clausura 2011, la luz le faltó al tirano de turno, quien una semana antes había sumido en la oscuridad a todos con su cuarto Royal Flush en la historia de los Holdem. El pelotón de seguidores tenía campo abierto para acercarse un poco al Robert, que no estuvo entre los diez de la mesa grande; sin embargo, con Alvarín ausente, Orate “no vieras” fuera de la mesa final, y Markeins décimo por un agresivo, pero muy apresurado, all-in, poco fue lo que pudieron hacer Junior y Killer, que apenas rasguñaron puntos. Gordito, una vez más te quedaste por fuera de “the bubble”, o sea, “la burbuja”.
Un tercer primo se unió como invitado: Edgar. Gracias a una gran dosis de suerte y atrevimiento, el stack de este consanguíneo en tercer grado de Santi, era verdaderamente impresionante… ocho o nueve torres de fichas hacían pensar que los Holdem podían perder en casa. Pero las sabias palabras del Flako, y un oportuno póquer de nueves, derrumbaron las murallas de la visita: ¡los Holdem hacemos respetar la localía, carajo! Edgar está herido, su confianza se ha mermado, Jota le propina una herida mortal, y tras un par de patadas de ahogado, es el turno de un servidor para dar el coup de grâce merced a un par de Ases. Así, los tres que habíamos lucrado del chip leader inicial, nos apertrechamos para la recta final.
Es aquí que comienza la diosa Fortuna a hacer de las suyas. Sensei lleva la batuta, casi duplicándonos las fichas al Flako y a quien les habla, pero dejándose llevar por su confianza en un par de dieces y en un As Reina pintados, pierde casi todo su stack en dos all-in consecutivos contra As Rey. Quedándole poco más de diez mil en fichas, se recupera con un As dos contra un As seis… desgraciados patos -dos por falta de uno en el flop- que malograron una mano de otra forma dominada. Con el Flako ya fuera, el head-to-head fue un emocionante diálogo de suerte o muerte. Basta relatar dos manos para describirlo: Jota con el triple de fichas y un par de Ases bien escondidos, recibe un flop soñado… siete, As, ocho; un servidor, cayendo ingenuamente en la trampa, va all-in con cinco y ocho; demás está decir que Sensei, casi riéndose, hace un instant call; pero ¿quién podría haber predicho lo que venía? Turn y river ¡seis y nueve!
Mano final, all-in ciego del co-editor debido a lo avanzado de la hora, fichas balanceadas con cierta ventaja para Jota. Este paga -¿por qué pagas Sensei?- con Reina y kicker bajo en suit, cuatro de tréboles por más señas. Abro mis cartas, y hallo con no poca sorpresa Reina y Sota… mano dominada. El flop trajo cinco, siete y ocho, el turn una Sota, y el river un infausto ¡seis! Bien dice el verso que, para subir al cielo se necesita una escalera grande y otra chiquita.
Salud para el digno vencedor de la noche y madrugada, ¡buena Sensei!
1 comentarios:
Mi estimado Boris, muy buena entrada realmente jocosa y entretenida. Lamentablemente la diosa fortuna no estuvo de mi lado el lunes, sin embargo espero que en las dos fechas que restan poder tener un mejor desempeño y subir algo mas en puntos y sobre todo en billete $$. Que bueno que se acabó la sequía de entradas en el BLOG, salud!!
Markeins.
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