Dice la letra de una canción que más de una vez me dejó en ese territorio baldío llamado tristeza: "Cuando un amigo se va, queda un espacio vacío, que no lo puede llenar la llegada de otro amigo", y hoy, lamentablemente, esos versos vuelven a mi cabeza con todos sus recuerdos y sensaciones.
Tantas veces vi partir a mi gente, tantas veces fui yo el que dejé atrás un mundo por ir en busca de otro, y envuelto en ese continuo exilio comprendí que lo más importante es ir dejando huella en los seres que, por momentos, recorren nuestro mismo camino.
Hoy (manaña, en estos días), un "señor" al que llamamos Manny se va en busca de otros mundos, pero se puede ir tranquilo porque cumplió con la premisa de dejar huella en sus amigos.
Les dejo con un pequeño homenaje escrito por Frank para su amigo (nuestro amigo) Manny:
Es muy difícil encontrar un buen amigo, más difícil todavía dejarlo e imposible olvidarlo.
La noche del jueves 08 de Abril de 2010, en un día inusual en nuestro calendario, nos reuniremos a jugar una fecha más de nuestro torneo de poker. A pesar de que podría parecer una noche común y corriente de jueves, para un grupo de amigos llamados “HOldem-U10” es una noche muy especial, ya que será la última partida de poker de nuestro buen amigo Manny en nuestro torneo. Es para mí todo un honor expresar unas pocas palabras de gratitud en nombre de los HOldem-U10:
Alegre, carismático, divertido, humilde, sencillo, amable, son las cualidades que sin duda te convierten en una persona totalmente distinta a las demás y que ha sabido ganarse un lugar en el corazón de las personas que te rodeamos. Es muy gratificante haber compartido 19 años de mi vida junto a una persona que con su tan particular forma de ser y con el pasar del tiempo se ha convertido en mi gran amigo. Tantas anécdotas, tantos recuerdos, tantas experiencias, alegrías, tristezas, son realmente infinitos los momentos que hemos vivido juntos y que perduraran para siempre en mi mente.
Gracias Manny por todo este tiempo, por haber sido incondicional, por tu sinceridad, por tu paciencia, por haber celebrado mis alegrías y por compartir mi dolor. De acuerdo al vicio que nos apasiona, debo decir también que tú fuiste quien me enseñó las jugadas básicas y luego, además, quien me invitó a formar parte de un grupo de amigos llamados Holdem-U10.
Para finalizar, quiero desearte de parte de todos los Holdem la mejor de las suertes en tu nueva vida, que todo te vaya muy bien, que siempre sigas adelante y puedas cumplir todos tus propósitos. Además decirte que se te va a extrañar mucho Manny y sobre todo que siempre serás recordado, tanto en las mesas como en la vida: en las mesas por esa admirable valentía en cada mano y ese inigualable carisma, y en la vida por ser un gran amigo.
Como te dije alguna vez, esto no será un ¡Adiós! sino un ¡Hasta luego!, porque un verdadero amigo es alguien capaz de tocar tu corazón desde el otro lado del mundo.
“Al final, no nos acordaremos tanto de las palabras de nuestros enemigos, sino de los silencios de nuestros amigos.”
Frank.